Trabajar en el mundo digital tiene millones de beneficios y lo sabemos, es un placer poder hacer lo que nos gusta desde cualquier lado del mundo. Trabajar desde nuestras casas es algo que valoro muchísimo pero empecé a darme cuenta el aumento de pantalla que consumía, y cómo el aire libre y lo verde se separaba mucho de mi trabajo. Es ahí en dónde empieza a surgir la idea de vincular lo natural que considero tan necesario para el bienestar humano, con el mundo digital, unirlos podría darle más vida a este mundo de pantallas y esa era la imagen que quería para mi negocio.

El nombre que tenia en ese momento (Digital Web Maker) no se vinculaba con la nueva imagen, por lo que quise buscar un nombre que reflejara lo que quería transmitir a nivel visual pero también que se conecte con los servicios de mi marca. Que sea corto, fácil de decir y de recordar, y con un significado profundo.

La dirección del negocio también iba a tener un cambio, incluyendo en sus servicios una orientación educativa brindando la posibilidad de, no solo que diseñemos tu web, si no que también podamos enseñarte a diseñar tu sitio. Unir esas dos opciones era exactamente la libertad que quería brindar a todas las personas que confiaran en mi marca.

Fue ahí que luego de una larga lista de opciones de nombres, pude ver a CULTIVÄ cómo aquel que incluía todos los significados.